Para presentar la canción del “Adivinador”, se nos ocurrió hacer algunas adivinanzas y el primero en dar una respuesta acertada, tendría un premio. Hasta ahorita, éste consistía en unas golosinas que siempre teníamos a mano.
Sin embargo, descubrimos que había muchas otras cosas que teníamos más a mano aún, y que solo necesitaban un poco de nuestra imaginación, o nuestros recuerdos de infancia para ser tenidas en cuenta, y convertirse en los próximos premios para el Adivinador.
¡De ahora en más regalaremos juguetes! Esos que son super divertidos, y bien baratos, solo que tantos otros que se venden en jugueterías, han hecho que los olvidemos.
Hoy vamos a presentar los primeros que se nos ocurrieron y que están recién acabaditos.
Con uusteedeeeeeeeeeees:
El famoso y bien ponderado “TA-TE-TI” o "GATO" en México.
Es tan fácil de hacer… puedes hacerlo con lo que encuentres. Nosotros usamos una tela, un marcador para hacer las líneas, seis tapitas de bebidas, y acrílico para pintarlas.
Para jugar al ta-te-ti, como algunos otros juegos de mesa, es necesario poner en acción la mente. Para quién no sepa jugarlo: se juega de a dos, se reparten 3 fichas para cada uno del mismo color, comienza primero uno, (en el próximo juego el otro), y ambos deben tratar de formar una línea recta con sus tres fichas (vertical, diagonal u horizontal), y a la vez impedir que el otro forme la suya. Parece simple, pero si tu contrincante sabe imaginar cual va a ser tu movimiento próximo… mmm, te veo mal…
El no tan famoso
“Pata-Pata”
¡¡Gracias a nuestra amiga Emi, que nos hizo acordar!!
Consiste en otro hilo (mientras más duro, mejor) y una pelota. Nosotros usamos de esas que están en los peloteros, porque un vecinito se cansó de tirárnosla al patio, y cuando se las devolvíamos, volvía a tirarlas… Gracias también al vecinito!! Algo importante es que la pelota debe ser más o menos pesada. Hay que llenarla con arena o arroz, por ejemplo.
Uno debe atarse la pelota (sueltita) en una de las piernas y la hacela girar (para mí lo más difícil) y saltar la pelota con la otra pierna (el que más aguante gana)
Muy divertido, y mucho mejor que quedarse sentado viendo tele… ¿no?
El
Teléfono Móvil (no precisa baterías, ni pertenecer a ninguna empresa de telefonía móvil)
Es muy simple de hacer, solo necesitas un hilo y dos vasos (de yogurt o cualquier otro que puedas agujerear sin que tu mamá te rete… jeje)
Es útil para decir secretos a larga distancia (hasta 7 u 8 metros!!!). También puedes hacer más de uno, y jugar al teléfono descompuesto… uno dice una palabra, el que lo escucha se lo dice al otro, y así hasta llegar al último de tus amigos, éste deberá decir en voz alta lo que escucho a ver si no fue un disparate…
Además, no estamos seguros que la lectura sea un juego, pero puede ser tan entretenida como cualquiera de los otros, y más si le pedís a alguien que te la lea con ganas!!!
Estas son tarjetitas con la poesía de María Elena Walsh que subimos a esta página “En Una Cajita de Fósforos”, y se las daremos a todos los niños aunque no hayan adivinado nada.
Esperamos que ya estén construyendo alguno de estos juegos, ¡¡¡U otros que se les ocurran!!!, y nos cuenten. Aceptamos todas sus ideas. Recuerden que a diario tiramos muchos posibles juegos a la basura, si los rescatamos tenemos muchas ventajas, por ejemplo:
· Un juguete nuevo sin hacerles gastar a tus papás.
· Ensuciamos un poquito menos nuestro planeta!!
· y lo mejor: nos divertimos construyéndolos!!!!